Adiós a la papada: así es como se combate la flacidez de la papada

El problema: la papada flácida

La línea de la mandíbula es una de esas cosas que probablemente das por sentada. Al igual que los hombros y las muñecas, no es algo que necesite ser apretado en Spanx o cubierto con mangas; simplemente no es un área problemática. Hasta que un día, probablemente alrededor de tus 30 años, lo sea.

Yo, en parte, culpo a Snapchat. La herramienta de filtrado facial afina la silueta de nuestro cráneo hasta alcanzar las proporciones de una princesa de Disney, dándonos el aspecto de un bebé ciervo. Pero luego quitas el filtro y te encuentras con que Shrek te devuelve la mirada. Seamos sinceros, no es que necesitemos otra parte del cuerpo por la que preocuparnos, pero una vez que has notado la creciente acumulación de carne blanda alrededor de los bordes exteriores de tu boca, derramándose lentamente por tu cuello, no hay vuelta atrás en la sensación de fatalidad inminente. En primer lugar, usted (y por «usted» me refiero a su médico) debe identificar la causa de la flacidez. El culpable número uno es la laxitud de la piel, que puede ser resultado de la genética, de enfermedades inflamatorias de la piel como el acné o la rosácea, que hacen que la piel envejezca más rápido, o de daños causados por el tabaco o la exposición al sol. Si su piel es laxa, las estructuras anatómicas más profundas de su cara simplemente no se mantendrán en su lugar.

El segundo delincuente es uno que nos afecta a todos eventualmente: la gravedad. A medida que envejecemos, nuestras almohadillas de grasa facial migran hacia abajo, causando pesadez y pérdida de definición en el tercio inferior de la cara. Esto se traduce en la prejubilación y la temida papada.

Las soluciones: Cremas, máquinas y sueños

Por suerte, la ayuda está al alcance de la mano. Si sufres de piel laxa, las cremas derivadas de la vitamina A, como la Tretinoína y el ácido retinoico, estimularán el fibroblasto, o sea, los componentes básicos de la piel, arreglándola desde dentro. Para camuflar, más que tratar, una línea de la mandíbula blanda, los rellenos de ácido hialurónico pueden contornear y enmascarar la papada definiendo la línea de la mandíbula. Sólo hay que tener cuidado con que el médico intente levantar la papada inflando demasiado las mejillas con rellenos dérmicos. Añadir volumen a su cara o reducir el movimiento muscular con Botox no va a corregir el problema subyacente y sólo distorsionará sus rasgos.

Para estimular la producción de colágeno, su médico puede sugerir tratamientos basados en máquinas, incluyendo radiofrecuencia, ultrasonidos, microagujas fraccionadas y láser. Esto puede ser un buen punto de partida si sólo tiene una pequeña laxitud. Sin embargo, los resultados de todos los dispositivos dependen de que se consiga una penetración uniforme en todas las células. Los efectos de los tratamientos con máquinas son temporales y pueden provocar más laxitud si se aplican de forma inexperta. También es importante que las máquinas no se utilicen para eliminar las bolsas de grasa, ya que éstas son esenciales para el soporte de la piel. Si tiene una flacidez más avanzada, los tratamientos con máquinas no serán suficientes para realizar cambios significativos en la papada.

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Cuando se trata de la migración de las almohadillas de grasa, me gusta utilizar un lifting con hilos; un lifting facial no quirúrgico que ajusta delicadamente su arquitectura facial. Se inserta un hilo fino en la piel y se tira suavemente hacia arriba para persuadir a las almohadillas de grasa caídas de vuelta a sus posiciones originales. Los hilos estimulan la producción de colágeno que mantiene las almohadillas de grasa en su sitio, y luego se disuelven de forma natural. Me encanta este enfoque porque me permite tratar varios planos faciales para conseguir un resultado perfecto para cada rostro, a diferencia del lifting tradicional, que actúa principalmente en los lados de la cara. Además, no añade ningún volumen al rostro. El procedimiento debe completarse cada pocos años. Por último, si ha entrado en el territorio del bulldog, con una papada que se extiende hasta el cuello, es probable que un lifting facial tradicional sea la mejor solución.

Si quiere evitar pasar por el quirófano, hay cambios en el estilo de vida que le ayudarán. Es importante que intentes mantener tu peso estable, ya que el aumento o la pérdida de peso fluctuante puede ser desastroso para la piel del rostro, ya que estás inflando y desinflando las almohadillas de grasa como si fueran globos, lo que hace que tu piel se estire. Por eso es muy difícil perder peso de la parte inferior de la barbilla después de los 30 años, ya que se producirá el temido cuello de pavo.

La llamada cara de corredor es un mito, de hecho el ejercicio mejora la piel al aumentar la circulación sanguínea. Sin embargo, si eres un ávido corredor, asegúrate de llevar siempre protección solar y un sombrero. Por último, entrénate para dormir de espaldas. Dulces sueños!

Dr. Shawana Vali

Las pieles de un vistazo

EN LOS 30
Cuando estás en la treintena y no tienes mucha flacidez, los tratamientos no invasivos más ligeros como el estiramiento de la piel por radiofrecuencia, el láser, los infrarrojos y la carboxiterapia podrían ser todo lo que necesitas.

EN LOS 40
Puede que tenga que empezar a considerar tratamientos más robustos, como el lifting con hilos tensores.

EN LOS 50 Y MÁS
Si tiene una cantidad significativa de flacidez puede que quiera optar por un lifting facial tradicional para ver los resultados que le gustaría. Sin embargo, cada persona es diferente, todo depende de la genética, la calidad de la piel y los antecedentes de enfermedades cutáneas.

De la edición de octubre de 2018 de Harper’s Bazaar Arabia

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