Autolesión

La autolesión se refiere a que una persona se dañe su propio cuerpo a propósito. Aproximadamente 1 de cada 100 personas se autolesiona de esta manera. Son más las mujeres que se autolesionan que los hombres. Una persona que se autolesiona no suele tener la intención de suicidarse. Pero corren un mayor riesgo de intentar suicidarse si no reciben ayuda.

Las autolesiones suelen comenzar en la adolescencia o en los primeros años de la vida adulta. Algunas personas pueden autolesionarse unas pocas veces y luego dejar de hacerlo. Otras lo hacen más a menudo y tienen problemas para dejar de hacerlo.

Los ejemplos de autolesiones incluyen:

  • Cortarse (como usar una hoja de afeitar, un cuchillo u otro objeto afilado para cortar la piel)
  • Golpearse o golpear cosas (como una pared)
  • Quemarse con cigarrillos, cerillas, o velas
  • Arrancarse el pelo
  • Perforar objetos a través de las aberturas del cuerpo
  • Romperte los huesos o magullarte

Muchas personas se cortan porque les da una sensación de alivio. Algunas personas utilizan el hecho de cortarse como medio para hacer frente a un problema. Algunos adolescentes dicen que cuando se hieren a sí mismos, intentan dejar de sentirse solos, enfadados o desesperados.

Es posible superar el impulso de hacerse daño. Hay otras maneras de encontrar alivio y hacer frente a sus emociones. El asesoramiento psicológico puede ayudar.

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