Betabloqueantes para problemas cardíacos
Camino hacia una mejor salud
Debe tomar los betabloqueantes exactamente como le indique su médico. Los betabloqueantes suelen tomarse de 1 a 2 veces al día. Intente tomar el medicamento a la misma hora cada día. No deje de tomar los betabloqueantes sin hablar antes con su médico. Si se olvida de tomar una dosis y se da cuenta unas horas más tarde, tome el medicamento de inmediato. Si han pasado más de 4 ó 6 horas, no tome la dosis que olvidó. En su lugar, espere a tomar la siguiente dosis programada. Nunca tome una dosis doble para ponerse al día.
Las personas que tienen ciertas condiciones de salud deben tener cuidado al tomar betabloqueantes. Si tiene diabetes, el medicamento puede ocultar los signos de advertencia de un nivel bajo de azúcar en la sangre. Por ejemplo, su ritmo cardíaco puede no aumentar normalmente en respuesta a un nivel bajo de azúcar en la sangre. Deberá comprobar cuidadosamente sus niveles de azúcar en sangre cuando tome un betabloqueante. Hable con su médico si tiene a menudo un nivel bajo de azúcar en la sangre. Es posible que quiera cambiar la dosis de su medicamento para la diabetes.
Los betabloqueantes pueden ser un problema para las personas que tienen asma. Pueden provocar ataques de asma. Colabore con su médico para controlar su asma y prevenir los ataques.
Las personas que tienen una enfermedad pulmonar crónica, como bronquitis, enfisema o ambas enfermedades juntas, conocidas como enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), pueden tomar betabloqueantes. Sin embargo, debe llamar a su médico inmediatamente si empieza a tener problemas respiratorios.
Los betabloqueantes pueden interactuar con otros medicamentos. Esto incluye los medicamentos de venta libre y los recetados. La interacción puede causar problemas de salud graves. Informe a su médico sobre todos los medicamentos que toma. Consulte a su médico antes de empezar a tomar cualquier medicamento nuevo.