Cirugía reoperatoria para las complicaciones de la hemorroidectomía

Las hemorroides siguen siendo uno de los trastornos más comunes tratados por los cirujanos colorrectales. Actualmente se dispone de una amplia variedad de opciones de tratamiento médico, en el consultorio y quirúrgico. Los principales procedimientos quirúrgicos entre los que los pacientes y los cirujanos pueden elegir incluyen la hemorroidectomía por escisión, la hemorroidopexia con grapas y la desarterialización hemorroidal transanal. Cada una de estas operaciones es segura, sin embargo, como todas las operaciones, conllevan ciertos riesgos de complicaciones. Algunas de estas complicaciones pueden requerir un tratamiento quirúrgico. El dolor es la complicación más común de las intervenciones de hemorroides. La mayoría de las veces se trata de forma no quirúrgica; sin embargo, el dolor puede ser secundario a un absceso, una trombosis o unas grapas retenidas, que pueden requerir un tratamiento quirúrgico. La hemorragia postoperatoria puede producirse debido a un flujo vascular incontrolado, a la dehiscencia de las heridas de hemorroidectomía cerradas o a la hemorragia en la línea de grapas. La estenosis es una complicación de la hemorroidectomía por escisión que puede requerir una anoplastia con reconstrucción con colgajo.

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