Cojera o cojera en perros: Síntomas, causas y tratamientos
La cojera (o cojera) en perros puede ser causada por varias razones subyacentes. La cojera es típicamente en respuesta a una lesión o anatomía anormal y su mascota puede o no sentir dolor.
La cojera puede afectar a una sola pierna o a varias, y puede ser constante o aparecer y desaparecer. Puede empeorar en determinados momentos del día, a primera hora de la mañana, a última hora de la noche, después de hacer ejercicio o después de descansar.
Esta guía contiene consejos expertos de enfermeras veterinarias cualificadas y registradas para ayudarle a elegir el mejor curso de acción para su mascota y ayudarle a responder a su pregunta: ¿por qué cojea mi perro?
Síntomas de cojera &causas comunes de cojera:
Síntomas y signos de presentación
- Rechazar cualquier peso sobre la pata o cojear
- Incapaz de caminar o correr normalmente
- Dificultad para subir o bajar las escaleras, o saltar al coche
- Dolor y signos generales de malestar
- Pérdida de masa muscular alrededor de la pata afectada
- Caminar a un ritmo más lento
- No colocar la pata en el suelo correctamente (conocido como nudismo)
- Hinchazón o anomalías alrededor de las articulaciones.
Causas comunes
- Traumatismo en la pata, rotura de huesos, rotura de ligamentos, dislocación
- Infección
- Artritis
- Enfermedades inflamatorias
- Anomalías congénitas (presentes al nacer)
- Cáncer de huesos
- Displasia de cadera o codo
- Heridas en las almohadillas de los pies
- Picadura de insecto
- Una garra rota o dañada
- Hacer demasiado ejercicio (sobreesfuerzo)
- Una piedra o espina clavada en las almohadillas
- Lesión nerviosa.
Una causa común de cojera en algunas razas como el Labrador Retriever y el Pastor Alemán es la Displasia de Cadera o Codo. Esta es una condición genética que hace que la articulación se malforme. Esto provoca cojera y dolor desde una edad relativamente temprana. Algunos perros necesitan una intervención quirúrgica, como una prótesis de cadera, y otros tienen que tomar medicamentos durante el resto de su vida. Muy a menudo no hay cura, por lo que un tratamiento cuidadoso de la enfermedad bajo el cuidado de un veterinario puede ayudar a mejorar la calidad de vida del perro. La mayoría de los criadores de renombre realizan ahora pruebas de detección de estas afecciones para ayudar a reducir la posibilidad de que se hereden.
- Lamidez en perros mayores
La languidez en perros mayores suele deberse a la aparición de artritis. Esta es una condición muy común en los perros de edad avanzada y afecta a las articulaciones, principalmente la rodilla, el hombro y las caderas. Los perros ancianos pueden beneficiarse de los suplementos nutricionales, los antiinflamatorios y las terapias complementarias como la hidroterapia, la fisioterapia y la acupuntura.
- Lamidez en perros jóvenes
La languidez en perros jóvenes y cachorros puede deberse a varias razones. Un ejemplo podría ser el exceso de ejercicio: los huesos y las articulaciones de los cachorros y los perros jóvenes no se forman adecuadamente hasta que pasan la pubertad, por lo que el exceso de ejercicio puede afectar negativamente a su crecimiento.
- Control del peso
El control del peso es muy importante a la hora de prevenir la cojera de su perro y si cree que su perro puede tener sobrepeso puede llamar al equipo de enfermería veterinaria de PetGP para que le asesoren al respecto o ponerse en contacto con su clínica veterinaria local y preguntar por su clínica de peso.
Diagnóstico de la cojera por parte de su veterinario
Su veterinario examinará a su perro a fondo y le hará un historial completo. El veterinario determinará dónde le duele más a su perro y comprobará si hay alguna anomalía en los huesos o las articulaciones. Es posible que el veterinario quiera realizar algunas pruebas, como radiografías o incluso un análisis de sangre.
Es importante que el profesional veterinario conozca la edad de su mascota, ya que hay dolencias específicas que afectan a los cachorros y perros jóvenes y a los perros mayores.
Si el veterinario recomienda una radiografía, ésta se realizará bajo anestesia general. Esto permitirá al veterinario mover la extremidad para obtener una buena visión sin causar dolor o molestias. El perro suele permanecer con el veterinario durante unas horas y volver a casa ese mismo día, dependiendo del diagnóstico. Una vez que el veterinario haya examinado las radiografías, decidirá cuál es el siguiente paso. A veces puede ser necesario remitir a su perro a un veterinario especialista, como un veterinario ortopédico o un neurólogo.
Tratamiento de la cojera
El tratamiento de la enfermedad dependerá del diagnóstico del veterinario.
Las formas de tratamiento que pueden manejarse en casa podrían implicar:-
- Para las causas menores de cojera (esguince) restringir el ejercicio de su perro, o el descanso completo durante unos días suele ser adecuado.
- Si no se conoce la causa exacta, puede ser necesario un periodo de reducción del ejercicio junto con antiinflamatorios y analgésicos para ver si la cojera mejora.
- Control del peso si su perro tiene sobrepeso y contribuye a la cojera.
El tratamiento hospitalario podría implicar:-
- Para causas más graves (huesos rotos, hernias discales) se requiere cirugía ortopédica o neurológica.
Prevención de la cojera
La cojera puede surgir durante la actividad diaria normal.
- Las lesiones graves, como los atropellos o las caídas de altura, pueden evitarse llevando al perro con correa hasta que sea seguro soltarlo.
- Tenga en cuenta los problemas genéticos que afectan a algunas razas con pedigrí.
- Mantenga vigilado el peso de su perro.
- Inspeccione sus patas y almohadillas con regularidad y elimine cualquier resto.
- Utilice fundas para los pies o una pomada de barrera en las almohadillas durante los meses de invierno para evitar que la sal y la arena les hagan daño.
- Limite la cantidad de ejercicio que realiza un perro que aún está creciendo para evitar problemas en las articulaciones.
- Los perros mayores necesitan menos ejercicio y si nota que se ralentizan busque el consejo del veterinario en primera instancia.
- Puede considerar el uso de suplementos nutricionales que contengan glucosamina o condroitina para ayudar a las articulaciones a medida que el animal envejece.
Preguntas frecuentes sobre la cojera del perro
¿Cómo puedo saber si mi perro está cojo?
Su perro puede ir un poco más despacio en los paseos y puede empezar a tener dificultades al subir las escaleras. Puede notar que camina a tres patas o que da un pequeño salto cuando camina.
¿Cómo puedo saber si mi perro tiene un tirón muscular?
Si su perro tiene un tirón muscular puede notar que cojea o que camina a tres patas. Es posible que mantenga la pata levantada cuando está quieto o sentado. También puede oírle gemir o llorar y puede dejar de comer si le duele mucho.
¿Cómo puedo saber si mi perro se ha cortado la pata?
Inspeccione las patas de su perro con regularidad, busque grietas en la superficie de la almohadilla. Puede que notes que tu perro sangra o que se lame la pata en exceso. Es posible que no quiera poner peso sobre ella y que gima o llore si le duele.
¿Cómo puedo saber si mi perro se ha roto un hueso?
Su perro puede estar gimiendo o llorando ya que una rotura o fractura de un hueso suele ser bastante dolorosa. Es probable que mantenga la pata en alto pero que intente poner un poco de peso sobre ella. La pata puede estar hinchada y probablemente le duela al tacto, si su perro puede tolerar su tacto entonces compruebe suavemente si hay calor procedente de la pata. La pata también puede parecer flácida.
¿Cómo puedo saber si mi perro tiene problemas de cadera?
Podrías notar que tu perro cojea o va más despacio en los paseos. Puede tener problemas para subir y bajar las escaleras y puede ser reacio a saltar. Puede tener una marcha anormal (la forma en que se mueven sus patas traseras cuando camina), o la posición de sus patas traseras cuando está de pie puede parecer diferente. Algunos perros desarrollan un movimiento de balanceo al caminar si tienen problemas de cadera.
¿Cómo puedo saber de qué pata cojea mi perro?
A veces es difícil saber de qué pata cojea su perro. La forma más obvia es si el perro no soporta el peso o mantiene la extremidad afectada cuando camina, se sienta o se pone de pie. Si puede apoyar el peso en ella, observe todo su cuerpo cuando camina; a veces el perro levanta ligeramente la cabeza cuando usa la pata dolorida y baja la cabeza cuando usa la pata que está bien. Toque suavemente las patas de su perro porque puede sentir algo de calor procedente de la pata dolorida y obsérvelo cuando esté quieto, ya que puede utilizar la pata normal para apoyarse, lo que indicaría que el otro lado le duele.
¿Puedo pasear a mi perro si cojea?
Debe descansar su perro durante al menos dos días si nota una cojera. Descansar significa hacer ejercicio con plomo solamente y paseos cortos de 5 a 10 minutos cada vez. Quédese con él en el jardín e incluso póngale una correa para restringir su ejercicio y ayúdele si necesita subir o bajar las escaleras o saltar a cualquier sitio (coche, sofá, cama, etc.).
¿Mi perro tiene dolor?
Los signos de dolor en un perro pueden variar mucho. Algunos perros son muy estoicos y valientes mientras que otros son más delicados. Es posible que escuche a su perro gemir, llorar o quejarse. Puede notar que el perro se lame la zona afectada o a veces una zona cercana. Algunos perros dejan de comer y pueden estar más pegados y atentos de lo normal. Por otro lado, algunos perros se vuelven más distantes y quieren estar solos si tienen dolor. A veces los cambios más sutiles en el comportamiento o la conducta son suficientes para indicar a un propietario atento que su perro tiene dolor.
Mi perro cojea después de hacer ejercicio/caminar.
Si nota que cojea después de hacer ejercicio puede ser que el perro esté haciendo demasiado a la vez. Podría probar a dar paseos más cortos y más frecuentes, en lugar de un paseo largo, y si no hay mejora, podría llamarnos a PetGP para que le ayudemos a evaluar la cojera.
Mi perro cojea de la pata trasera.
El signo más evidente de cojera de la pata trasera es un pequeño salto o brinco cuando caminan y corren. A veces, esto puede convertirse en una pata levantada y no querer poner peso en ella. Podría tratarse de una simple distensión, así que intente que su perro descanse durante un día o dos, pero si cree que le duele, póngase en contacto con un veterinario.
Mi perro cojea de la pata delantera.
Es posible que haya notado que su perro es reacio a los paseos o que favorece un lado más que el otro. Examina la pata del perro y comprueba si hay alguna anomalía, como hinchazón, calor o una herida. Si no hay nada que ver, pruebe a dejarle descansar un día o llámenos a PetGP
Una de nuestras enfermeras podría ayudarle a evaluar la cojera para ver si necesita ponerse en contacto con un veterinario.
Mi perro cojea cuando se levanta después de descansar.
En perros mayores esto puede ser un signo de artritis. Las articulaciones se vuelven más rígidas a medida que el perro envejece. Puedes notar que tras unos minutos de paseo la cojera mejora. En perros que todavía están creciendo puede ser el signo de otros problemas articulares. En PetGP podemos ayudar a evaluar al animal por teléfono e informarle si creemos que debe ponerse en contacto con un veterinario.
Descubrir la causa de la cojera en su perro
Como se ha indicado anteriormente, las causas de la cojera en los perros pueden ser muy variadas.
En PetGP, nuestras enfermeras veterinarias con sede en el Reino Unido siguen unas estrictas directrices establecidas por nuestro director veterinario y formulan una serie de preguntas que determinan la gravedad relativa del estado de su mascota.
Este proceso permite descartar los casos más graves (que deben ser tratados por un veterinario) y le lleva a aconsejarle sobre lo que debe hacer a continuación por su mascota. Si procede, nuestras experimentadas y bien informadas enfermeras veterinarias le darán los consejos pertinentes para el estado de su mascota basándose en sus respuestas.
- Nuestras enfermeras veterinarias tituladas con base en el Reino Unido le harán varias preguntas diseñadas para evaluar (triage) la condición
- Necesitará estar con el perro ya que le pediremos que compruebe algunas cosas mientras está al teléfono con nosotros
- Le preguntaremos si ha estado cojo el perro durante cuánto tiempo y si sabe cómo se produjo la lesión
- Le pediremos que toque la pata afectada y que sienta cualquier hinchazón, calor o dolor y que mire la pata y la pata por si hay algún corte o anomalía que ver.
Llámanos a PetGP si no estás seguro o estás preocupado y nuestras expertas enfermeras te aconsejarán sobre qué hacer. Si la situación no merece un viaje al veterinario, le daremos consejos para manejar la situación en casa.
Si la cojera es causada por un simple esguince o tensión, entonces 48 horas de descanso y ejercicio restringido pueden ser suficientes para mejorar la situación drásticamente.
Su perro puede tener un pequeño corte en su almohadilla que, si no sangra o se infecta, puede estar bien para tratar en casa con un poco de descanso y una limpieza con solución salina.
Si la situación es más grave le aconsejamos que se ponga en contacto con su veterinario.