El antílope sahariano addax se enfrenta a una extinción inminente

Un amplio estudio realizado en marzo en el hábitat clave del addax identificó sólo tres ejemplares restantes, informan expertos de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), dos de sus miembros que trabajan en la región -el Fondo de Conservación del Sáhara (SCF) y la ONG Noé-, así como la Convención sobre las Especies Migratorias (CMS).

La legislación nacional de Níger protege plenamente al addax, lo que significa que la caza y la extracción de addax vivos por cualquier motivo están estrictamente prohibidas. También está protegido por la Convención sobre Especies Migratorias (CMS) porque su hábitat histórico se extiende hasta el vecino Chad.

Sin embargo, el addax ha sufrido una perturbación masiva debido a las instalaciones petrolíferas en Níger operadas por la Corporación Nacional de Petróleo de China (CNPC) y la invasión asociada de camiones y excavadoras en el desierto. Además, la asignación de personal militar para proteger la industria petrolera significa que la caza ilegal por parte de los soldados ha aumentado considerablemente los niveles de caza furtiva en el último refugio que le queda, y la mayor zona protegida de África, la Reserva Natural Nacional de Termit & Tin-Toumma, en el este de Níger.

El Dr. Jean-Christophe Vié, Director Adjunto del Programa Mundial de Especies de la UICN, afirma: «Estamos asistiendo en tiempo real a la extinción de esta especie emblemática y antaño abundante; sin una intervención inmediata, el addax perderá su batalla por la supervivencia ante la caza furtiva ilegal e incontrolada y la pérdida de su hábitat. En nombre de todas las partes implicadas, recomendamos una serie de medidas de emergencia para ayudar a salvar al addax de su inminente extinción».

Las medidas propuestas por los expertos de los grupos conservacionistas incluyen asegurar la población restante de addax; detener la caza furtiva por parte de los soldados y comprometerse con la CNPC para cooperar en la prevención de la extinción del addax; así como reforzar la población existente mediante la introducción de ejemplares criados en cautividad.

El aumento de la caza furtiva también se produce en un contexto de creciente inseguridad en toda la región. El colapso de Libia en 2011 provocó un éxodo de milicianos con armas y vehículos 4×4 hacia los países vecinos en zonas que albergan importantes poblaciones de fauna silvestre. Esto también alimentó las insurgencias posteriores en Malí y el norte de Nigeria, que se han sumado a la inestabilidad, y los hábitats antes remotos de los addax se han convertido en importantes encrucijadas para el comercio ilícito de vida silvestre, armas, drogas y migrantes.

El Dr. Thomas Rabeil, del Fondo de Conservación del Sáhara, afirma: «Quienes tienen intereses comerciales en el desierto podrían hacer importantes contribuciones a la protección del addax cooperando con las autoridades de la vida silvestre y adoptando prácticas más sensibles, convirtiéndose en partes interesadas en la gestión de las áreas protegidas y compartiendo los avistamientos de estos esquivos animales con los conservacionistas».

La situación del addax se ha deteriorado precipitadamente desde 2010, cuando una ronda inicial de estudios estimó la población en 200 animales. Desde entonces, los conservacionistas han diseñado un triple plan de acción para estabilizar la situación mediante la localización de los addax restantes y la evaluación de su estado. El plan pretende impulsar los esfuerzos en curso para aumentar la capacidad del servicio de vida silvestre de Níger para proteger a los addax y gestionar la Reserva Termit & Tin Toumma en estrecha colaboración con la población local. La tercera parte, fundamental, del plan consiste en colaborar con las autoridades de Níger y los intereses empresariales chinos para controlar la caza furtiva y minimizar el impacto de las actividades relacionadas con el petróleo, especialmente en el hábitat principal del addax.

Arnaud Greth, Presidente de Noé, afirma: «Trabajando en coordinación con el Ministerio de Medio Ambiente, Noé se ha centrado en reforzar las capacidades de la Unidad de Gestión de la Zona Protegida de Termit & Tin Toumma y en apoyar la política de conservación de Níger para reforzar la conservación del addax sobre el terreno. Pero las presiones humanas están aumentando más rápido de lo que podemos adaptarnos, dado el nivel actual de apoyo a los recursos para el addax y el amplio rango de distribución del addax en la mayor área protegida terrestre de África».

Sin embargo, extensos estudios aéreos y terrestres financiados en parte por la iniciativa SOS – Save Our Species de la UICN y el zoológico de Saint Louis y realizados por SCF durante marzo de 2016 indicaron que el addax se enfrentaba a una extinción inminente. Utilizando tecnologías de reconocimiento y vigilancia de inteligencia (IRS) de última generación, incluyendo la captura de infrarrojos y cámaras de ultra alta resolución capaces de distinguir las especies desde el aire, el estudio cubrió más de 3.200 km de transectos a través del hábitat clave del addax utilizando un avión C-208 Cessna Caravan alquilado a la fuerza aérea de Níger. Lamentablemente, los investigadores no pudieron identificar a ningún animal tras 18 horas de vuelo.

Mientras tanto, el equipo de tierra buscó en más de 700 km de hábitat privilegiado para el addax y en otras zonas donde otros habían visto huellas de addax durante los seis meses anteriores. Después de seguir algunas huellas durante más de 10 km, el equipo de tierra confirmó el avistamiento de un pequeño grupo: tres individuos de addax muy nerviosos.

Varias especies de antílopes se daban antiguamente en grandes cantidades en vastas extensiones del desierto del Sáhara y las praderas sahelianas circundantes. En un pasado reciente, más de un millón de oryx con cuernos de cimitarra se extendían por el norte de África, desde el Atlántico hasta el río Nilo, por ejemplo. Sin embargo, la especie desapareció de la naturaleza en la década de 1990 a causa de la caza incontrolada y la pérdida de hábitat. Ahora, otro de sus parientes cercanos -el emblemático addax- está peligrosamente cerca de compartir ese destino.

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