Insomnio: Los estudios sugieren que el calcio y el magnesio son eficaces
Según la Fundación Nacional del Sueño (NSF), casi seis de cada diez estadounidenses dicen tener insomnio y problemas de sueño al menos unas cuantas noches a la semana. El insomnio se define como «una incapacidad para conciliar el sueño o permanecer dormido el tiempo suficiente para sentirse descansado, especialmente cuando el problema se prolonga en el tiempo.» En un esfuerzo por combatirlo, hasta el 25 por ciento de las personas en los Estados Unidos utilizan medicamentos para ayudarles a dormir.
La mayoría de los somníferos, especialmente cuando se toman durante largos períodos de tiempo, pueden tener múltiples efectos secundarios. Los fármacos permanecen en el torrente sanguíneo, producen un efecto de resaca al día siguiente y más allá, y pueden aumentar el riesgo de accidentes de coche y de trabajo. También perjudican la memoria y el rendimiento en el trabajo y en casa.
Desde el punto de vista nutricional, varios estudios de investigación han demostrado que ciertos minerales son eficaces ayudas naturales para el sueño que ayudan a conciliarlo y a mantenerlo durante toda la noche. El doctor James F. Balch, autor de Prescription for Nutritional Healing (Receta para la curación nutricional), escribe: «La falta de los nutrientes calcio y magnesio hará que te despiertes al cabo de unas horas y no puedas volver a dormir.»
El calcio está directamente relacionado con nuestros ciclos de sueño. En un estudio, publicado en la revista European Neurology Journal, los investigadores descubrieron que los niveles de calcio en el cuerpo son más altos durante algunos de los niveles más profundos del sueño, como la fase de movimiento ocular rápido (REM). El estudio concluyó que las alteraciones del sueño, especialmente la ausencia de sueño profundo REM o el sueño REM alterado, están relacionadas con una deficiencia de calcio. El restablecimiento del curso normal del sueño se consiguió tras la normalización del nivel de calcio en sangre.
El doctor William Sears escribe: «El calcio ayuda al cerebro a utilizar el aminoácido triptófano para fabricar la sustancia inductora del sueño, la melatonina. Esto explica por qué los productos lácteos, que contienen tanto triptófano como calcio, son uno de los principales alimentos inductores del sueño.»
En la deficiencia de magnesio, el insomnio crónico es uno de los síntomas principales y centrales. El sueño suele ser agitado con frecuentes despertares nocturnos. Por otro lado, se ha comprobado que una dieta alta en magnesio y baja en aluminio se asocia con un sueño más profundo y menos interrumpido. Así lo demostró un estudio realizado por James Penland en el Centro de Investigación de Nutrición Humana de Dakota del Norte. El estudio se tituló «Efectos de la nutrición con oligoelementos en los patrones de sueño de las mujeres adultas». Es importante señalar que una proporción equilibrada de calcio y magnesio es importante para la salud en general, y que estos dos minerales deben tomarse juntos para obtener los mejores resultados.