¿Por qué varía el color, la textura y el sabor de la miel?
Quizá nunca se le haya pasado por la cabeza, pero hay tantos tipos de miel como de flores. Y te creerías que pueden variar drásticamente en sabor, color y textura… sigue leyendo para saber un poco más sobre…
Hice alusión a lo que causa las variaciones en el párrafo de arriba del gráfico. Y la respuesta sencilla, el sabor, el color y la textura están determinados por la fuente de néctar que recogen las abejas.
(Dato curioso: las mieles «aromatizadas» por las flores que visitan se conocen como miel varietal)
Por ejemplo, la mayoría de la gente está familiarizada con la miel de trébol. El trébol es una flor abundante que a las abejas les encanta visitar y recoger néctar para llevarlo a la colmena. Las abejas toman este néctar y lo revuelven y abanican hasta que el contenido de agua disminuye y se convierte en el espeso jarabe que nos gusta disfrutar de diversas maneras. Este es el sabor que la mayoría de la gente asocia con la miel. Es ligeramente dulce y tiene un sabor agradable. (En la imagen de arriba, el trébol es el segundo de la izquierda.)
Ahora imagina un campo de lavanda. La lavanda tiene un olor muy marcado. El olor es una de las propiedades de la lavanda que la hace única. Estoy seguro de que puedes imaginar que la miel producida principalmente a partir de esta flor podría tener un sabor drásticamente diferente al de la miel producida a partir de las flores de trébol.
El sabor también puede verse afectado por el envase y el cuidado que se tenga durante el almacenamiento. Los envases de vidrio mantienen el sabor original de la miel (si se limpian adecuadamente antes de llenarlos). Los envases de plástico y metal pueden filtrar sustancias químicas en la miel y alterar el sabor.
Así que eso explica la diferencia de sabor. El color y la textura pueden depender de los mismos factores.
La miel cruda puede variar de color desde muy oscura a casi incolora dependiendo de la fuente floral. El color también puede verse afectado por la edad, ya que la miel generalmente se oscurece con la edad. Otro factor que influye en el color de la miel es el proceso de cristalización. La miel suele ser más clara cuando se cristaliza.
Y eso nos deja con la textura. La textura puede depender de la fuente floral. La miel de trébol tiende a tener una consistencia cremosa mientras que la de almendra y la de diente de león son muy gruesas. Esto se debe a la diferencia de propiedades de la fuente de néctar. Algunas tienen un contenido de agua mucho menor y varían en su composición química.
Y por eso la miel varía en sabor, color y textura.