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El mágico Mahre supera la adversidad para alcanzar el oro

Cuando el cuerpo arrugado del estadounidense Phil Mahre se detuvo finalmente tras una horrible caída en los campeonatos del mundo de Lake Placid en 1979, pocos dudaron de que el daño en su tobillo supondría un serio revés para una carrera que, hasta entonces, había sido rica en promesas.

Casi increíblemente, Mahre llegó a los Juegos de Invierno en la misma ciudad sólo 12 meses después y participó en las tres pruebas de esquí alpino, a pesar de tener todavía el contenido de una pequeña ferretería atornillado en varios recovecos de su tobillo.

Estaba completamente fuera de juego en el descenso, donde terminó en el puesto 14º, y en el eslalon gigante, donde sólo pudo ser 10º.

Pero en el eslalon, la maravillosa y desafiante primera carrera de Mahre, cuando llevó al gran Ingemar Stenmark al segundo puesto, provocó un revuelo de expectación entre los espectadores, conscientes de que podían estar a punto de presenciar una gran victoria.

Pero el estadounidense no pudo producir la magia suficiente para vencer al sueco y al final tuvo que conformarse con un valiente segundo puesto.

Mahre, cuyo hermano gemelo Steve también era un esquiador de primera categoría, se había ido labrando una formidable reputación en el circuito desde sus primeras carreras en 1976, cuando ganó el eslalon de Val d’Isere.

Superlativo en Sarajevo

El norteamericano fue de menos a más a pesar de ese contratiempo, alzándose con el título general de la Copa del Mundo en 1981, 1982 y 1983, mientras se preparaba para su próximo asalto a los Juegos Olímpicos, que se celebrarían en Sarajevo en 1984.

Todas las miradas estaban puestas en Phil y su hermano gemelo Steve en el eslalon, con los espectadores y millones de personas viendo la televisión ansiosos por ver si los Mahres, que habían renunciado a participar en competiciones europeas, podían hacer frente a la nieve de Sarajevo.

Phil tuvo que conformarse con el tercer puesto en la primera manga, mientras que Steve ocupó la primera posición.

Pero en la segunda manga Steve cometió un error en la parte superior del recorrido y Phil, aprovechando la oportunidad, corrió para conseguir su merecida medalla de oro, mientras que Steve se llevó la plata.

Después de su magnífico doblete en los Balcanes, los hermanos Mahre se retiraron de la competición en 1984, con 27 victorias para Phil y nueve para Steve.

Los dos hermanos abrieron un centro de entrenamiento juntos en 1985 en el complejo turístico de Keystone, en Colorado.

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