Vivir con un puerto
Un puerto médico no es más grande que una moneda. Pero si tiene un cáncer de colon avanzado, es probable que haya cambiado su forma de recibir quimioterapia.
El puerto se coloca bajo la piel, normalmente cerca de la clavícula. Un tubo blando llamado catéter lo conecta a una vena grande por encima del corazón. El medicamento y los líquidos inyectados en el puerto fluyen desde esta vena hasta el torrente sanguíneo.
Esto significa que puede recibir quimioterapia sin tener que colocar una vía intravenosa en una vena para cada tratamiento. Y como la mayoría de los análisis de sangre pueden extraerse del puerto, no necesitará constantes pinchazos en el brazo. Además, un puerto tiene menos probabilidades que una vía intravenosa de filtrar medicamentos que puedan dañar la piel y otros tejidos.
La quimioterapia a través de un puerto también puede doler menos, según el Dr. Smitha Krishnamurthi, oncólogo médico de la Clínica Cleveland.
«Saben dónde se colocará la aguja, por lo que pueden adormecer el puerto aplicando crema de lidocaína en la piel sobre el puerto antes de entrar», dice Krishnamurthi. «De esta forma, el puerto está adormecido cuando llega el momento de que la enfermera acceda a él con una aguja».
Para muchas personas con cáncer avanzado, un puerto significa que pueden recibir los tratamientos en casa en lugar de en el hospital.
«No podemos enviar a casa la quimioterapia a través de una vía intravenosa en el brazo porque podría desprenderse fácilmente, por ejemplo, mientras duermen», dice Krishnamurthi. «El puerto proporciona una forma segura y fiable de tener la quimioterapia en infusión en casa».