3 maneras sorprendentemente sencillas de prevenir los padrastros
Un padrazo desagradable puede hacer que el simple hecho de coger un bolígrafo sea una experiencia incómoda. Incluso si te haces la manicura con regularidad, parece que una vez que empiezan, tu única opción es pasar la siguiente semana con una tirita y el ceño fruncido.
¿Qué pasa? «Siempre nos preguntamos por qué tenemos las manos y las cutículas secas, pero es porque no las tratamos adecuadamente», dice Deborah Lippmann, famosa manicurista y propietaria de una línea homónima de esmaltes de uñas. (Consigue una prueba gratuita de Prevention + 12 regalos gratis.)
Sigue estos sorprendentes y sencillos consejos para tener unas uñas libres de enganches de forma permanente.
Mantén la hidratación.
«Piensa en tu cara: Probablemente no te lavarías la cara y no la hidratarías después», dice Lippmann. Mantén un bote de crema de manos en el lavabo del baño o en tu escritorio y masajea las cutículas después de lavarte las manos. Masajear las uñas y las cutículas con regularidad también es bueno para el crecimiento de las uñas, hace que la sangre fluya hacia la superficie para que las uñas estén sanas y crea un rubor rosado para que las uñas se vean bien con o sin esmalte.
MÁS: 10 asombrosos trucos de belleza con aceite de coco
Deja de recortar.
Las cutículas actúan como barrera para las bacterias, así que evita cortarlas. En su lugar, aplica una crema removedora de cutículas donde tu piel se une a la uña, y empuja suavemente las cutículas hacia atrás con un empujador suave, para no rayar la placa de la uña. Los trozos de piel que quedan levantados son -adivinaste- uñas colgantes. Corta con cuidado sólo estos trozos de piel muertos.
MÁS: 7 cosas raras que tus dientes están tratando de decirte
Haz un remojo de uñas.
Si eres propensa a los padrastros, prueba a remojar tus dedos en un aceite rico como el de jojoba o el de coco. Empapa las uñas en el aceite para hidratarlas realmente. A continuación, envuelve las manos en toallas calientes (calentadas en el microondas o empapadas en agua caliente) para retener la humedad. Haz esto una vez a la semana para mantener a raya los padrastros.