Camello bactriano
No todo es calor, calor, calor
El camello bactriano es una de las criaturas más adaptables del planeta. Puede soportar cambios extremos de temperatura, lo que es ideal para su hábitat natural en el norte de Asia. Sorprendentemente, pueden soportar temperaturas que oscilan entre los +40°C en verano y los -30°C en invierno.
Sus dos jorobas funcionan exactamente igual que en un camello de una sola joroba, o dromedario. Las jorobas son zonas de almacenamiento de grasa. Utilizan la grasa convirtiéndola en energía para poder pasar mucho tiempo sin comida ni agua.
Cuando las jorobas de un camello bactriano están llenas de grasa se mantienen erguidas. Cuando sus reservas de grasa son escasas, las jorobas se vuelven caídas.
También puedes notar que durante el verano nuestros camellos bactrianos parecen un poco, bueno, desordenados. Esto se debe a que ese increíble y grueso pelaje que tienen para mantenerse calientes en invierno no sirve de nada en verano, así que se desprenden de él o se lo quitan. Esto ocurre por sí solo, pero es posible que veas a James o a Genghis frotándose contra su casa para intentar ayudarles a hacerlo.
Conservación
Los camellos de Bactriana están realmente en peligro de extinción. La mayor amenaza para ellos es la destrucción por parte de los humanos de su hábitat natural para la agricultura y la minería. Además, a través de la introducción de ganado en ciertas áreas para que los camellos se encuentran compitiendo por la comida.
Los gobiernos de Mongolia y y China han acordado trabajar juntos con el fin de detener la disminución de los camellos bactrianos.