Centro de Recursos para la Demisexualidad

La asexualidad gris puede ser difícil de entender debido a su amplia definición. Abarca a las personas que se identifican fuertemente con la asexualidad, pero no sienten que asexual sea la palabra más correcta para ellos. Hay muchas definiciones e identidades posibles bajo el paraguas gris de la asexualidad, pero aquí están algunas de las más comunes:

  • Siente atracción sexual con poca frecuencia, de baja intensidad, hacia pocas personas o en circunstancias específicas
  • Siente atracción sexual pero no tiene ningún deseo de actuar en consecuencia
  • tiene sentimientos confusos o ambiguos de atracción sexual
  • siente que la atracción sexual no es un concepto significativo para ellos personalmente

Lo principal que hay que recordar sobre la asexualidad gris es que un individuo puede definirla como quiera y que es una orientación única. Si la definición de un asexual gris no coincide con una de las anteriores, no significa que su identidad no sea válida.

¿En qué se diferencia la asexualidad gris de la demisexualidad?

La asexualidad gris es un término con muchas definiciones posibles, mientras que la demisexualidad tiene una definición más específica: sentir atracción sexual sólo después de formar un vínculo emocional. Sin embargo, algunos demisexuales consideran que la demisexualidad está bajo el paraguas de la asexualidad gris porque implica sentir atracción sexual en circunstancias específicas. Algunos demisexuales también se relacionan con otras definiciones de asexualidad gris, como el hecho de encontrar experiencias de atracción sexual confusas o difíciles de precisar. Es posible y válido utilizar ambas etiquetas si se aplican ambas.

¿Cómo sé si soy asexual gris? ¿Dónde está la línea entre asexual gris y no asexual?

No hay una prueba de fuego para determinar si eres asexual gris o no. Eres asexual gris si sientes que la palabra te describe. Los asexuales grises tienen diversas experiencias, pero lo que todos tienen en común es que se relacionan con la asexualidad. Si sientes que te relacionas con el concepto de asexualidad y con las experiencias de los asexuales, pero esa palabra no es la adecuada para ti, entonces es posible que seas asexual gris.

La sexualidad tampoco es cuantificable. No hay ninguna autoridad que decrete que si has sentido atracción sexual por más de X personas o más de Y veces, no eres asexual gris y en cambio eres no asexual. No existe una línea divisoria entre ambos. Algunas personas que podrían considerarse asexuales grises eligen identificarse como no asexuales, y algunas personas que podrían considerarse no asexuales eligen identificarse como asexuales grises. Si te relacionas con el concepto de asexualidad gris, entonces eso es lo que te hace asexual gris.

Al igual que los demisexuales y los asexuales, los asexuales grises tienen una variedad de hábitos y preferencias. Algunos sienten repulsión por el sexo mientras que otros no. Algunos ven porno y/o se masturban, mientras que otros no lo hacen. Algunos tienen manías y fetiches. Algunos experimentan una clara atracción por uno o dos géneros. No hay una forma correcta o incorrecta de ser asexual gris.

¿Por qué la asexualidad gris es una etiqueta necesaria?

Hay muchas identidades posibles relacionadas con la asexualidad que son distintas de la no asexualidad, como las enumeradas anteriormente. Muchos asexuales grises se identifican así porque no se sienten seguros etiquetándose únicamente como asexuales o no asexuales. La palabra asexual gris les da un lugar para estar aparte, posiblemente compartiendo sentimientos y experiencias de otras orientaciones pero también teniendo las suyas propias, únicas para su orientación.

Para algunos asexuales grises, es útil conceptualizar el espectro asexual, con la asexualidad en un lado y la no asexualidad en el otro. Pueden sentir que pueden relacionarse con ambos lados y que están entre los dos. Sería inexacto para ellos elegir un lado.

Podría ser útil comparar la asexualidad gris con la bisexualidad. Los bisexuales comparten las experiencias de atracción sexual hacia otros y hacia el mismo género con los heterosexuales y los homosexuales, pero tienen una orientación única y sentimientos y experiencias exclusivas de esa orientación. Muchos bisexuales eligen su etiqueta porque no les resulta útil o preciso identificarse sólo como homosexuales o sólo como heterosexuales.

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