Deje de lado la col rizada por la col rizada
La col rizada es la peor de las verduras de hoja verde. Han sido apartadas a la esquina más lejana del pasillo de productos para dar paso a 17 variedades diferentes de col rizada. Me entristece saber que mientras la berza está en su mejor momento, los restaurantes y las tiendas de comestibles siguen saturando el mercado de alimentos con la molesta col rizada. Por ello, he desglosado algunas razones por las que este debería ser el año de la col rizada, y por fin podremos dejar de lado la col rizada.
Lo más importante es que la col rizada es más densa en nutrientes que sus homólogas arrugadas. Según la base de datos de composición de alimentos de la USDA, una ración de berzas crudas tiene menos calorías y más calcio, y cuenta con las mismas vitaminas que han hecho que la col rizada sea tan popular entre los gurús de la salud.
Una de las razones por las que no soy un gran fan de la col rizada es porque sabe a… bueno, sabe a verdura. Y lo digo de la manera más ofensiva posible. Aunque sigue siendo abundante, la berza me parece un verde más suave. En los meses de invierno, cuando están en temporada, incluso los tallos, que normalmente se desperdician al preparar la col rizada, tienen un sabor dulce. Me gusta picar los tallos crudos mientras cocino, o reutilizarlos en recetas que requieren apio.
Al igual que con la col rizada, se pueden hacer ensaladas, guisos, batidos e incluso patatas fritas con la berza. Las hojas anchas y planas de la berza también la convierten en la hoja verde perfecta para envolver y rellenar. Rellénalas con cereales, proteínas magras o más verduras para conseguir una comida divertida y saludable. Las pretenciosas hojas rizadas de la col rizada no pueden resistir el desafío.
Por último, siempre habrá un lugar muy especial en mi corazón, y en mi paladar, para una gran olla de hojas verdes hecha por las manos de una abuela sureña. Si dejas que la berza se cueza a fuego lento el tiempo suficiente, se vuelve tierna y muy sabrosa. Para conseguir el efecto sureño completo, añada un jarrete de jamón y una libra de sal, pero yo prefiero mantener las cosas sencillas (y veganas) con ajo y cebolla cuando cocino mis berzas.
La próxima vez que necesite una dosis de verduras, dé una oportunidad a las berzas, y juntos podremos dar a este verde la gloria que se merece.