Detallado de automóviles

El detallado es más que un proceso de limpieza para que un vehículo tenga un buen aspecto, sino un enfoque sistemático para ayudar a prolongar su vida con métodos y productos que reducen los elementos ambientales perjudiciales como la suciedad, el sol, los inviernos duros, etc. El mantenimiento o la restauración adecuados de los vehículos para que sigan luciendo por fuera y por dentro como si salieran de la sala de exposición de un concesionario de automóviles aumentan su valor de reventa. El detallado de automóviles requiere el conocimiento de las técnicas adecuadas y el uso de herramientas y productos.

El detallado se divide generalmente en dos categorías: exterior e interior (o cabina). Hay productos y servicios que se centran en estas dos áreas específicamente.

El detallado exterior implica la limpieza, y la restauración o la superación del estado original de la superficie del acabado del coche (normalmente una pintura con un acabado brillante), las molduras cromadas, las ventanas, las ruedas y los neumáticos, así como otros componentes visibles en el exterior de un vehículo. Se utiliza una amplia gama de productos y técnicas de detallado, en función del tipo y el estado de la superficie del vehículo, o de las preferencias del detallista o del cliente. Los productos incluyen, pero no se limitan a: detergentes, tensioactivos, desengrasantes sin ácido (para eliminar la suciedad), arcilla para detalles (para eliminar los contaminantes invisibles de la superficie), ceras, aderezos a base de silicona y sin silicona para las molduras de plástico y los neumáticos. Compuestos de pulido y abrillantadores para resurgir y mejorar la reflectividad del acabado de la pintura, así como una variedad de aplicadores, cepillos y toallas de secado.

El detallado interior implica una limpieza profunda de todo el habitáculo interior. Los interiores de los vehículos de los últimos 50 años se componen de una gran variedad de materiales, como la tapicería de moqueta sintética, el vinilo, el cuero, diversas fibras naturales, compuestos de fibra de carbono, plásticos y otros, lo que hace necesario el uso de una gran variedad de técnicas y productos de limpieza. Lo normal es pasar la aspiradora, y las manchas de la tapicería pueden eliminarse con limpieza a vapor, productos químicos líquidos y de espuma, así como con cepillos. Los hongos o el moho (que suelen aparecer en los asientos de cuero y el salpicadero durante la temporada de lluvias) pueden limpiarse con vinagre blanco. Además, se pueden pulir algunas superficies no porosas.

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