Diagnóstico y tratamiento de la policitemia vera
Diagnóstico
Los análisis de sangre se utilizan para diagnosticar la policitemia vera. Los signos pueden incluir:
- Un aumento de los glóbulos rojos, las plaquetas y los glóbulos blancos
- Un hematocrito alto (la proporción de glóbulos rojos en la sangre)
- Un aumento de la concentración de hemoglobina (una proteína que se encuentra en los glóbulos rojos)
- Niveles bajos de eritropoyetina (una hormona que controla la producción de glóbulos rojos)
Las pruebas adicionales pueden incluir:
- Biopsia de médula ósea o aspiración para tomar una muestra de médula ósea
- Pruebas para detectar la presencia de la mutación JAK2 u otras mutaciones genéticas
Tratamiento
Los diferentes proveedores de atención médica que participan en su atención pueden incluir un hematólogo/oncólogo, una enfermera, una enfermera navegadora, un trabajador social de oncología o un farmacéutico. Estas personas pueden ayudarle a encontrar información y recursos que pueden ser útiles antes, durante y después del tratamiento. Pregunte a su médico por los demás miembros de su equipo sanitario: sus nombres y cómo puede concertar una cita con ellos. También puede pedir a su compañía de seguros que le asigne un gestor de casos para ayudarle a entender qué tratamientos y servicios cubrirá su seguro médico.
Las opciones de tratamiento dependen de su diagnóstico y de la extensión de la enfermedad. Los distintos fármacos utilizados para tratar la policitemia vera actúan de forma diferente y pueden tener distintos efectos secundarios. Pida más información antes de iniciar el tratamiento. Sus opciones pueden incluir:
- La aspirina, tomada por vía oral en dosis bajas, puede ayudar a reducir el riesgo de coagulación, y se recomienda para la mayoría de los pacientes con PV
- La flebotomía extrae sangre de una vena para reducir el número de glóbulos rojos en el organismo. Este tratamiento suele utilizarse en primer lugar.
- Las terapias citorreductoras (por ejemplo, hidroxiurea), que pueden reducir los recuentos sanguíneos, suelen administrarse por vía oral.
- Inteferón alfa, que puede reducir los recuentos sanguíneos, se administra por vía subcutánea. Las preparaciones de liberación sostenida (por ejemplo, peginterferón alfa-2a), tienen una tolerabilidad superior.
- Inhibidores JAK: nuevos tipos de fármacos que se centran en atacar un problema genético que se ha relacionado con la policitemia vera.
Otros tratamientos pueden estar disponibles a través de ensayos clínicos. Los ensayos clínicos pueden ofrecer la oportunidad de beneficiarse de los últimos tratamientos o combinaciones de tratamientos a la vez que ayudan a avanzar en el conocimiento de la enfermedad y sus opciones de tratamiento. Pregunte a su equipo médico si un ensayo clínico puede ser adecuado para usted.