Fármacos anticolinérgicos

Los anticolinérgicos pueden ser útiles para el temblor y pueden aliviar la distonía asociada al efecto de desgaste o de dosis máxima. Tienen poco efecto sobre otros síntomas de la EP.

No actúan directamente sobre el sistema dopaminérgico. En su lugar, disminuyen la actividad de la acetilcolina, un neurotransmisor que regula el movimiento. Los efectos adversos potenciales incluyen visión borrosa, sequedad de boca, estreñimiento y retención urinaria.

Además, las investigaciones del Proyecto de Resultados de Parkinson de la Fundación Parkinson han apoyado el hallazgo de que el enlentecimiento cognitivo es un efecto secundario de los anticolinérgicos. Las personas mayores son especialmente susceptibles de sufrir confusión y alucinaciones con los anticolinérgicos, por lo que estos agentes deben evitarse en personas mayores de 70 años.

Formas de anticolinérgicos

Benztropina (Cogentin®)

Dosis disponibles: 0,5 mg, 1 mg, 2 mg
Régimen de tratamiento típico: 0,5-2 mg 2-3 veces al día
Efectos secundarios: Confusión, problemas de memoria, alucinaciones, sequedad de boca, visión borrosa, retención urinaria
Indicación: Monoterapia o terapia combinada, predominantemente para el temblor y la distonía en personas jóvenes; debe evitarse en ancianos. También puede ser útil para reducir la cantidad de saliva para tratar el babeo excesivo debido al efecto secundario de la sequedad de boca.

Trihexifenidilo HCL (antes Artane®)

Dosis disponibles: 2 mg, 5 mg comprimidos. 2 mg/5 ml de elixir
Régimen de tratamiento típico: 1-2 mg 2-3 veces/día
Efectos secundarios: Confusión, problemas de memoria, alucinaciones, sequedad de boca, visión borrosa, retención urinaria
Indicación: Monoterapia o terapia combinada, predominantemente para el temblor y la distonía en personas jóvenes; debe evitarse en ancianos. También puede ser útil para reducir la cantidad de saliva para tratar el babeo excesivo debido al efecto secundario de la sequedad de boca.

Efectos secundarios

  • Confusión
  • Alucinaciones
  • Disminución de la memoria a cortomemoria a corto plazo
  • Sequedad en la boca
  • Visión borrosa
  • Retención urinaria

Hechos rápidos

  • Los anticolinérgicos son la clase más antigua de medicamentos para tratar la EP; se utilizaron por primera vez en la década de 1900
  • Pueden utilizarse para reducir la cantidad de saliva que se produce y, por lo tanto, pueden disminuir el babeo
  • Son más útiles para los pacientes más jóvenes con EP cuya queja principal es el temblor

Discusiones:

* Tenga en cuenta que los efectos secundarios enumerados en las tablas que acompañan a cada clase de medicamento son los más comúnmente experimentados. No todos los individuos experimentarán dichos efectos secundarios. Para muchas personas que experimentan efectos secundarios, a menudo pueden limitarse o eliminarse eficazmente con ajustes cuidadosos de la dosis o del horario de las dosis individuales.

Hable con el médico tratante inmediatamente si experimenta algún efecto secundario. Para una descripción completa de cada medicamento y sus posibles efectos secundarios, solicite a su farmacéutico el «prospecto» de cada medicamento utilizado. Se recomienda que todas las recetas se surtan en la misma farmacia para evitar interacciones entre los medicamentos. Las interacciones pueden ser peligrosas e incluso poner en peligro la vida, así que asegúrese de que el farmacéutico conoce todos los medicamentos y suplementos que se están tomando, incluidos los de venta libre.

Precaución: Los medicamentos para la EP pueden tener interacciones con ciertos alimentos, otros medicamentos, vitaminas, suplementos de hierbas, pastillas para el resfriado de venta libre y otros remedios. Cualquier persona que tome un medicamento para la EP debe hablar con su médico y su farmacéutico sobre las posibles interacciones con otros medicamentos.

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