Información sobre la inyección en la articulación facetaria cervical
¿Qué son las articulaciones facetarias cervicales?
Las articulaciones facetarias cervicales son pequeñas articulaciones situadas en pares en la parte posterior/lateral del cuello. Estas articulaciones proporcionan estabilidad y guían el movimiento de la columna vertebral.
¿Por qué son útiles las inyecciones en las articulaciones facetarias?
Si las articulaciones se vuelven dolorosas debido a la artritis, a una lesión o a una tensión mecánica, pueden causar dolor en varias zonas. Las articulaciones facetarias cervicales pueden causar dolor en la cabeza, el cuello, el hombro o el brazo.
Una inyección en la articulación facetaria sirve para varios propósitos. En primer lugar, al colocar un medicamento adormecedor en la articulación, la cantidad de alivio inmediato del dolor que experimente ayudará a confirmar o negar que la articulación sea la fuente de su dolor. Es decir, si obtiene un alivio completo de su dolor principal mientras las articulaciones facetarias están adormecidas, entonces es probable que estas articulaciones sean el origen de su dolor. Además, se inyectará cortisona de liberación prolongada en estas articulaciones para reducir cualquier presunta inflamación, lo que puede, en muchas ocasiones, proporcionar un alivio del dolor a largo plazo.
¿Qué me ocurrirá durante el procedimiento?
Se iniciará una vía intravenosa para poder administrar, si es necesario, un medicamento de relajación adecuado. Después de acostarse en una mesa para artritis, lesiones o estrés mecánico, se limpiará bien la piel sobre la zona de la columna vertebral que se va a tratar. A continuación, el médico adormece una pequeña zona de la piel con un medicamento adormecedor (anestésico), que pica durante unos segundos. A continuación, el médico utilizará la guía de rayos X para dirigir una aguja muy pequeña hacia la articulación. A continuación, inyecta varias gotas de medio de contraste para confirmar que el medicamento sólo entra en la articulación. A continuación, se inyecta lentamente una pequeña mezcla de medicamento adormecedor (anestésico) y cortisona antiinflamatoria.
¿Qué debo hacer después del procedimiento?
De 20 a 30 minutos después del procedimiento, usted mueve su zona de molestia habitual para tratar de provocar su dolor habitual. Usted informa de su dolor restante (si lo hay) y registra el alivio que experimenta durante la semana siguiente en un «diario del dolor» que le proporcionamos*. Es posible que sienta o no una mejora durante las primeras horas después de la inyección. Esto depende de si las articulaciones inyectadas son su principal fuente de dolor.
El diario del dolor es un componente importante de su atención. Ayuda a su médico tratante a estar informado de sus resultados para poder planificar futuras pruebas y/o el tratamiento necesario.
¿Cómo me sentiré después del procedimiento?
En ocasiones, la parte de su columna vertebral tratada puede sentirse ligeramente débil o extraña durante unas horas después de la inyección. Puede notar un ligero aumento del dolor durante varios días, ya que el medicamento anestésico desaparece antes de que la cortisona sea efectiva.
Típicamente, el hielo es más útil que el calor durante los dos o tres primeros días después de la inyección.
Puede empezar a notar una mejora del dolor entre 2 y 5 días después de la inyección. Si no nota mejoría en los 10 días siguientes a la inyección, es poco probable que se produzca.
¿Puedo tomar mis medicamentos habituales después del procedimiento? Puede tomar sus medicamentos habituales después del procedimiento, pero intente limitar cualquier medicamento para el dolor durante las primeras 4-6 horas después del procedimiento. Esto asegurará que la información diagnóstica obtenida en el procedimiento sea precisa.
Es posible que se le remita a terapia física o manual después de la inyección mientras el medicamento anestésico sea efectivo y/o durante varias semanas mientras la cortisona esté actuando.
¿Cuándo puedo reanudar la actividad?
El día de la inyección no debe conducir y debe evitar cualquier actividad extenuante. Al día siguiente del procedimiento, puede volver a sus actividades habituales.
Cuando su dolor mejore, comience a realizar su ejercicio habitual con moderación. Aunque haya mejorado considerablemente, aumente gradualmente sus actividades durante 1 ó 2 semanas para evitar la reaparición del dolor.
Comentario de Curtis W. Slipman, MD
Las articulaciones facetarias cervicales pueden precipitar el dolor de cuello con posibles síntomas referidos a la cabeza, la parte superior de la espalda y/o la parte superior del brazo. La única prueba que puede demostrar que la articulación facetaria es el origen del dolor es un bloqueo de la articulación facetaria de diagnóstico, ya que la tomografía computarizada, la radiografía y la resonancia magnética no suelen ser destacables. A diferencia de un tratamiento o bloqueo terapéutico (inyección) en el que se utiliza un esteroide, una inyección de diagnóstico sólo utiliza un anestésico local. Es esencial que se identifique la articulación específica que causa el problema para poder ofrecer una inyección terapéutica específica. Aunque muchos pacientes consiguen aliviar sus síntomas, no todos se curan. De hecho, en nuestro estudio publicado desde el Penn Spine Center, casi 2 de cada 3 pacientes con problemas graves obtuvieron un alivio drástico de su dolor de cuello y sus dolores de cabeza diarios tras la inyección terapéutica en la articulación. En esos casos, debe considerarse un procedimiento conocido como denervación por radiofrecuencia.