La generalización de Cthulhu: cómo una creación de terror marginal se hizo popular
En el verano de 1926, un escritor entonces poco conocido, Howard Phillips Lovecraft, escribía la que sería su obra más conocida, La llamada de Cthulhu. Esta historia se publicaría en Weird Tales en 1928 y tendría un inmenso impacto cultural, que sigue creciendo hoy en día.
Inspiraría innumerables relatos cortos, novelas, videojuegos, películas, canciones y mucho más, todos creados por escritores y artistas que tomaron los temas centrales de Cthulhu y le dieron su propio giro al canon del Mythos. Las diversas iteraciones y giros de Cthulhu han dado lugar a todo tipo de interpretaciones, desde las más perturbadoras del Gran Anciano como destructor oscuro y alienígena, hasta su representación como un simpático peluche. Tal vez el peluche era inevitable una vez que Cthulhu y sus semejantes se convirtieron en un meme replicado millones de veces en muchos idiomas.
El propio Lovecraft nunca sabría el éxito y el impacto cultural que tendrían ésta o cualquiera de sus otras obras. Cuando murió en 1937 sólo sabría que sus obras habían llegado a un público limitado, sin haber ganado nunca lo suficiente con sus obras como para ganarse la vida como escritor.
Sin embargo, más de 90 años después de que expusiera el argumento de La llamada de Cthulhu, la idea, los temas y la criatura epónima han llegado por fin al gran público. La mayoría de nosotros ha oído hablar de «La llamada de Cthulhu» de una forma u otra.
Hablo como un converso a esta llamada. Cuando era joven descubrí el Mythos y desde entonces he estado leyendo, escribiendo y creando obras «inspiradas» en él. ¡Ahora mismo soy parte del equipo que trabaja en una adaptación del exitoso juego de rol Achtung! Cthulhu.
¿Cthul-qué? ¿Qué son los Mitos de Cthulhu?
Para aquellos que no estén familiarizados con los Mitos de Cthulhu, el titular Cthulhu es un titánico ser alienígena que duerme en la inhumana ciudad hundida de R’lyeh que se encuentra en el Pacífico Sur. Una vez, hace muchos eones, Cthulhu y otros seres como él gobernaron la tierra. Tal es el poder de Cthulhu, que incluso dormido es capaz de influir en los sueños de los humanos y ha creado un culto fragmentado pero global de adoradores que lo consideran un dios. Tanto la deidad como sus discípulos esperan el momento en que despierte, salga de su prisión acuática y vuelva a ocupar el lugar que le corresponde como gobernante del planeta.
Si al leer este artículo te cuesta un poco pronunciar «Cthulhu», no eres el único, y ese era en cierto modo el objetivo de Lovecraft con el nombre: se pretende que suene inhumano, y nos cuesta pronunciarlo con nuestras enclenques cajas de voz humanas.
Lovecraft escribió un montón de historias ambientadas en el mismo universo que Cthulhu, utilizando temas, personajes y objetos comunes, como el libro de ficción ‘El Necronomicón’ que documenta gran parte de esta terrible «realidad». Otros autores se unieron a esta construcción del mundo, añadiendo dioses oscuros, extrañas razas de criaturas, ciclos de mitos, artefactos perdidos, más tomos prohibidos, y así sucesivamente hasta que juntos habían creado un vasto y rico universo narrativo que se ha conocido como el «Cthulhu Mythos». Desde la muerte de Lovecraft en 1937, otros autores han tomado el manto y el Mythos se ha expandido en muchas nuevas direcciones.
El supergrupo de escritores de Lovecraft
Una de las cosas interesantes ha sido cómo un círculo de escritores se tomaron prestados unos a otros nombres, lugares y seres para sus propias obras, creando en efecto un «universo de código abierto» en el Mythos. Les encantaba referirse a las obras de los demás, entrelazando sus historias en el tapiz del Mythos. Por las numerosas cartas que se enviaron, parece que esto fue más un acto de diversión creativa que un esfuerzo consciente por crear un entorno narrativo mítico.
Sin embargo, la obra de los creadores de mitos incluye a algunos escritores de gran prestigio. Robert E. Howard -que se haría famoso por crear a Conan el Bárbaro- escribió varias historias del Mythos. Por ejemplo, «Gusanos de la Tierra», ambientada durante la ocupación romana de Gran Bretaña, hace referencia a la ciudad hundida de R’lyeh. A su vez, Lovecraft hizo referencia en su obra a un tomo ficticio prohibido que Howard había creado, Unaussprechlichen Kulten (también conocido como Cultos sin Nombre). Un joven Robert Bloch -que llegaría a escribir la famosa novela Psicosis que Alfred Hitchcock adaptaría en una de las películas de terror más influyentes de todos los tiempos- aparece incluso como el personaje Robert Blake en el relato corto de Lovecraft The Haunter of the Dark. Lovecraft mata alegremente al personaje de Bloch, devolviendo la gracia que éste le hizo al añadir un apoderado de Lovecraft a su cuento El vacilante de las estrellas.
También hicieron referencia a obras más antiguas de autores que admiraban, como Ambrose Bierce, que creó otra ciudad ficticia -Carcosa- en 1886. Robert W. Chambers la reelaboró en su influyente colección de relatos de 1895, El rey de amarillo, a la que Lovecraft y otros volvieron a hacer referencia. Estos ejemplos no son más que una instantánea de cómo el Mythos se entreteje en las obras de una serie de autores creando un espacio mítico que es mayor que la suma de sus partes.
Podría seguir, pero si quieres explorar más a Lovecraft y la obra de sus compañeros, te recomiendo encarecidamente que te suscribas a HPPodcraft, ya que tienen una visión fascinante que profundiza aún más de lo que yo he hecho aquí.
Los sueños de Cthulhu en la cultura popular
Wikipedia tiene una enorme lista de obras inspiradas en el Mito de Cthulhu. ¡En este artículo escogeré algunos artículos para mostrar el rango de inspiración;
- South Park – Tiene a Justin Bieber destruido por Cthulhu en uno de sus episodios más populares.
- Bloodborne – El videojuego aclamado por la crítica hace referencia al Mythos desde su arquitectura, a las criaturas dentro de esa arquitectura, a su narrativa.
- La Trilogía Illuminatus! Trilogía – Una trilogía que explora la idea de una conspiración global. La trilogía hace referencia al Mythos muchas, muchas veces e incluso tiene a Lovecraft como personaje.
- True Detective – La primera serie de la HBO está entretejida con referencias al Mythos, más notablemente «The King in Yellow».
- Supernatural – La serie de televisión de larga duración explora los temas del Mythos y también añade a Lovecraft como personaje dentro del programa.
- Hearthstone – Los aficionados al Mythos reconocerán al instante muchas de las referencias de la actualización de Los Susurros de los Dioses Antiguos.
- El Juego de Rol La Llamada de Cthulhu – El aclamado juego de rol está ambientado en los mundos del Mythos y ha popularizado y ampliado la ambientación. Muchos aficionados descubrieron a Lovecraft a través del juego, yo incluido.
Las actitudes de los años 20 hacia los años 2020
Sería un error escribir sobre el Mythos y no señalar su lado problemático. Dado que muchas de las obras seminales fueron escritas en la primera mitad del siglo XX, no sorprende, tristemente, encontrar que muchas de sus actitudes hacia la raza, el género y la sexualidad que ahora nos resultan incómodas (¡por decir algo!) están repletas en gran parte de las obras del Mythos. El debate sobre cómo enmarcar esto en la actualidad todavía hace estragos.
Lo que me parece interesante es cómo aquellas voces que fueron marginadas o ridiculizadas en la década de los años 20 están saliendo a la palestra para reclamar y reinterpretar el Mythos a medida que éste evoluciona. Por ejemplo, en la excelente The Ballad of Black Tom, el autor afroamericano Victor LaValle replica el racismo apenas velado de The Horror at Red Hook de Lovecraft. En la brillante The Dream-Quest of Vellitt Boe, la autora Kit Johnson reelabora Unknown Cadith de Lovecraft a través de los ojos de una protagonista femenina. En la reciente meditación sobre la obra de Lovecraft realizada por el aclamado creador de cómics Alan Moore, Providence, éste, con conocimiento de causa, hace que el personaje central sea un hombre gay que vive en el Nueva York de los años 20, lo que es a la vez un reflejo y un rechazo de la visión de Lovecraft sobre la sexualidad.
¿Por qué tan Cthulhu?
Así pues, desde un puñado de escritores pulp que se afanaban (principalmente) en los años 20 y 30 en publicaciones marginales, y a menudo con poca o ninguna recompensa, hasta casi cien años después y un tema cultural mundialmente reconocido que sufre una constante reinvención, recombinación y recalibración, tenemos hoy el Mito de Cthulhu. Pruebe a buscar Cthulhu en Twitter para ver un ejemplo de lo relevante que sigue siendo la obra hoy en día.
¿Por qué los Mitos de Cthulhu se han convertido en un fenómeno cultural tan grande? Mi sensación, como fan y como creador de materiales del Mythos, es que se reduce a dos razones principales;
- La naturaleza de «código abierto» del Mythos original significa que nació dentro del concepto de que otros añadieran su propia versión. Esto también significa que viene con una especie de «mashup-malleability» – puede ser eternamente remezclado.
- El tema central del Mythos, que la humanidad no es más que una nota a pie de página menor en la historia de la Tierra, nos habla como parte de nuestro propio miedo y fascinación con la muerte y el concepto de «el apocalipsis».
Mezclas de Mythos
Una de las razones por las que el Mythos ha sido tan prevalente y duradero es lo bien que se puede mezclar con otras narrativas para crear nuevos giros en una historia. ¡Hay una gran cantidad de nuevas creaciones a partir de este enfoque «mashup» -demasiadas para mencionarlas todas-, pero como son una parte clave del atractivo de Cthulhu, vale la pena explorar algunas de ellas aquí.
Por ejemplo, en Achtung! Cthulhu, los nazis obsesionados con lo oculto encuentran los restos del Mythos enterrados bajo la tierra y se dedican a saquearlos para fusionarlos con sus programas de ciencia inhumana para crear nuevas y aterradoras armas con las que ganar la Segunda Guerra Mundial. Como todos los buenos mashups, esto toma un núcleo de realidad y deja caer la pregunta «qué pasaría si» en él. Está bien documentado lo obsesionados que estaban los nazis con el conocimiento oculto y los sitios antiguos, así que este mashup se pregunta «¿y si lo oculto fuera real? ¿Y si lo oculto fuera el Mythos?» y, de repente, tenemos la aterradora perspectiva de que, en este universo ficticio, todos los recursos que los nazis estaban vertiendo en la investigación esotérica darían sus frutos, pero también que ya no son el ser más terrorífico dentro de la guerra: están haciendo pactos con seres más antiguos que la humanidad y que buscan la perdición total de ésta. La desesperada lucha de la Segunda Guerra Mundial adquiere ahora una dimensión extra aterradora cuando los Aliados tratan de descubrir la verdadera naturaleza de los planes de los nazis e intentan detenerlos. Lo que sigue es una guerra secreta dentro de otra guerra: la lucha por destruir un búnker secreto en la Antártida o recuperar un tomo prohibido de una biblioteca oculta en la Europa ocupada. Después de haber trabajado en esta mezcla durante un tiempo, las conexiones son fascinantes y aterradoras, ¡los ingredientes perfectos para una ambientación de juego de rol! También es genial que si tienes que enfrentarte a las criaturas del Mythos, ¡prefieras tener una gran potencia de fuego militar para hacerlo!
Cabe destacar también algunos otros mashups, ya que se trata de un filón tan rico;
- ¿Y si el gran Sherlock Holmes tuviera que investigar el Mythos? Esa es la premisa de la colección de relatos Shadows Over Baker Street, uno de los cuales (de Neil Gaiman), se convirtió en un juego de mesa: A Study in Emerald.
- ¿Y si las potencias de la guerra fría descubrieran a los Grandes Antiguos enterrados en secreto y trataran de reclutarlos? Lee el excelente A Colder War de Charles Stross para explorar esta idea.
- De Tintín: Un crossover de Cthulhu hasta Cowboys, Romanos, Edades Oscuras, Cyberpunk, y más, los creadores están experimentando salvajemente con el Mythos, y a menudo con gran efecto.
No somos más que una paja en el ojo de Cthulhu
El libro Straw Dogs (Perros de Paja) del filósofo político John Gray señala que los humanos no hemos asumido del todo lo que nos dice la Teoría de la Evolución de Darwin: que al igual que nosotros, como individuos, nacemos para morir, nuestra especie también nace para morir. Nuestra propia mortalidad está garantizada, pero también la de nuestra especie, ya que lo que nos muestran los registros fósiles es que las especies evolucionan a partir de sus ancestros, y luego mueren, dejando quizás una especie descendiente que ocupe su lugar. Nosotros, los humanos, a pesar de nuestras inteligentes herramientas y tecnología, no somos tan especiales: también seguiremos el camino de los dinosaurios. Las únicas preguntas son «cómo» y «cuándo».
Estamos, innegablemente, fascinados con el apocalipsis. Como dijo Quentin Cooper:
«No es fácil entender que la Tierra haya existido durante miles de millones de años, y que probablemente exista durante millones, si no miles de millones más, y que nuestra propia vida, en comparación, por muy larga y fructífera que sea, sea un instante casi infinitesimalmente insignificante en medio de todo ello. Tan fugaz y tan lejos de cualquier final de la historia que muchos de nosotros nos comportamos como agujeros negros individuales, deformando mentalmente el tiempo para escribirnos a nosotros mismos en el gran final».
Así, argumenta que nuestra fascinación por el fin de los tiempos se debe a que intentamos dar sentido a la enormidad de todo ello y a nuestro diminuto lugar en él.
¡El Mito de Cthulhu es esta idea multiplicada por diez! No sólo nosotros y el mundo se acabarán, sino que las mismas fuerzas que lo harán lo están tramando ahora mismo, ¡y algunas personas incluso les están ayudando! Podríamos intentar detenerlos, pero eso es poco más que pisar el agua antes de que las olas nos ahoguen.
¿Pero qué más podemos hacer? No hay ningún redentor que nos salve, sólo somos motas a los ojos de titánicos seres extraterrestres cuyo único interés en nosotros es tan fugaz como el nuestro en una molesta mosca que estamos considerando aplastar. Es un pensamiento aterrador, aunque seductor, que convierte a los humanos en polillas para la llama de Cthulhu. Como escribió el propio Lovecraft;
«Lo más piadoso del mundo, creo, es la incapacidad de la mente humana para correlacionar todos sus contenidos»
.