Lo que debe saber sobre el herpes genital
El herpes genital es una infección de transmisión sexual (ITS) que se transmite más fácilmente por el contacto con la piel infectada durante las relaciones sexuales. El tratamiento puede reducir los síntomas, pero la infección no se puede curar con medicamentos. Hay formas de reducir la posibilidad de contraer o transmitir el herpes genital, como utilizar un preservativo cada vez que se mantienen relaciones sexuales.
Las palabras que utilizamos aquí – El CATIE se compromete a utilizar un lenguaje que sea relevante para todos. Las personas utilizan diferentes términos para describir sus cuerpos. Este texto utiliza términos médicos, como vagina y pene, para describir los genitales. Otras personas pueden utilizar otros términos, como partes privadas o pene o agujero delantero. El CATIE reconoce y respeta que las personas utilizan las palabras con las que se sienten más cómodas.
¿Qué es el herpes genital?
El herpes genital es una infección de transmisión sexual (ITS) causada por el virus del herpes simple. Puede causar ampollas en los genitales, el ano, el recto y/o los labios y la boca. Una persona con herpes genital puede transmitírselo a otra durante las relaciones sexuales.
Muchas personas con herpes genital no presentan síntomas o los confunden con otra enfermedad, por lo que no saben que tienen una infección. Cuando los síntomas se presentan, pueden tardar de 2 a 12 días en aparecer. Los síntomas más comunes pueden ser:
- ampollas (lesiones), individuales o en racimos, en cualquier parte de la zona de los genitales o el ano; estas ampollas forman costras y se curan en una o dos semanas
- picazón, hormigueo, ardor o dolor en la piel de las zonas infectadas
- dolor en las piernas o las nalgas
- inflamación de los ganglios linfáticos de la ingle
- secreción acuosa de la vagina
- fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular
- fatiga
¿Puedo contraer herpes genital?
Cualquier persona sexualmente activa, incluidas las que sufren violencia sexual, puede contraer herpes genital.
El herpes genital se transmite más fácilmente durante las relaciones sexuales sin preservativo; esto incluye el coito vaginal y el coito anal. Una persona con herpes genital puede transmitir la infección aunque no tenga síntomas.
El herpes genital también puede transmitirse:
- cuando una persona con una infección por el virus del herpes en la boca o la garganta practica sexo oral a otra persona
- cuando una persona practica sexo oral a otra que tiene una infección por el virus del herpes en los genitales
- a través del contacto oral-contacto anal (rimming)
- por compartir juguetes sexuales o durante una masturbación o digitación si los fluidos infectados llegan al juguete o a la mano
Herpes genital y VIH
Para las personas con VIH, una infección por herpes genital puede aumentar la cantidad de VIH en los fluidos corporales y aumentar la posibilidad de transmitir el VIH a las parejas sexuales.
Alguien que tiene herpes genital puede tener más probabilidades de contraer el VIH si se expone a él durante las relaciones sexuales.
¿Qué puedo hacer?
Prevenir la infección
Las personas con herpes genital deben evitar el contacto sexual cuando tengan un brote, es decir, cuando tengan ampollas u hormigueo o ardor en la piel, porque esto puede reducir pero no eliminar el riesgo de transmitir la infección.
Utilizar un preservativo durante las relaciones sexuales vaginales y anales. Los preservativos sólo son eficaces si la zona infectada está cubierta por el preservativo.
Utilice un preservativo o una barrera bucal durante el sexo oral.
No existe ninguna vacuna que proteja contra el herpes genital.
Hágase la prueba
La única forma de saber con seguridad si tiene o no herpes genital es hacerse la prueba. Un médico o una enfermera pueden realizar la prueba. La prueba consiste en tomar una muestra de los fluidos de una llaga. Los análisis de sangre también pueden determinar si alguien tiene una infección por herpes, pero no pueden determinar si se trata de una infección oral o genital.
Es una buena idea hacerse la prueba de otras infecciones de transmisión sexual (ITS), incluido el VIH, cuando se hace la prueba de herpes genital. Otras ITS pueden transmitirse del mismo modo que el herpes genital. Hable con su proveedor de atención médica sobre la frecuencia con la que debe realizar las pruebas de herpes genital u otras ITS.
Consiga tratamiento
El herpes genital no puede curarse con medicamentos. Sin embargo, si tiene herpes genital, los medicamentos antivirales pueden ayudar a prevenir los brotes o a reducir los síntomas durante un brote. Para que estos medicamentos funcionen, es importante que los tome exactamente según las indicaciones de su médico.
Durante un brote, las personas pueden tomar analgésicos de venta libre, aplicar compresas de hielo en las lesiones, tomar baños calientes con sal o bicarbonato de sodio y usar ropa interior de algodón holgada para ayudar a reducir el dolor o la irritación.
Créditos
Esta hoja informativa se ha elaborado en colaboración con el Consejo de Información y Educación Sexual de Canadá (SIECCAN).