Problemas de mandíbula: Ejercicio y relajación
Resumen del tema
Para ayudar a prevenir o tratar un trastorno temporomandibular (TTM), puede probar ejercicios suaves para la mandíbula. También puede probar técnicas que le ayuden a relajar los músculos de la mandíbula.
Ejercicios
Pruebe un ejercicio suave para restaurar el rango normal de movimiento, mejorar la flexibilidad y fortalecer los músculos de la mandíbula. Su médico, dentista o fisioterapeuta puede recomendarle ejercicios adicionales.
No haga este ejercicio cuando el dolor sea intenso o si empeora el dolor.
- Mientras se observa en un espejo, abra y cierre suavemente la boca, dejando caer la mandíbula recta hacia arriba y hacia abajo.
- Repítalo durante unos minutos cada mañana y noche.
- Busque pequeñas mejoras en la amplitud de movimiento de la mandíbula a medida que practique este ejercicio día a día.
Relajación
Poner atención a la forma en que utiliza la mandíbula puede prevenir y ayudar a aliviar los síntomas.
Los buenos hábitos que ayudan a relajar y descansar la mandíbula incluyen:
- Mantener los dientes separados y los labios cerrados.
- Mantener la lengua en el paladar, no entre los dientes.
Evitar las cosas que hacen que la mandíbula esté tensa:
- Acoger el auricular del teléfono entre el hombro y la mandíbula.
- Abrir la boca por completo, como cuando se canta en voz alta o se bosteza (intente bajar la cabeza al pecho para reprimir un bostezo).
- Apretar o rechinar los dientes, morderse los labios o morderse las uñas. Intente reconocer cuándo está apretando los dientes, entonces relaje la mandíbula y separe los dientes.
- Apretando cosas como bolígrafos, pipas o cigarros entre los dientes.
Para más consejos, consulte Problemas de mandíbula: Cambiar la dieta y Trastornos temporomandibulares: Formas de aliviar el dolor.