Ojo hinchado e inyectado en sangre tras una cefalea
La rotura de un aneurisma carotídeo cavernoso (ACC) con fístula carotídea cavernosa puede aparecer como una cefalea benigna pero evolucionar a un ojo hinchado e inyectado en sangre durante la noche. Una mujer de 66 años acudió al servicio de urgencias con un dolor repentino detrás de la frente izquierda y vómitos. Fue tratada por una cefalea de tipo migrañoso y dada de alta. Al día siguiente se presentó de nuevo con una cefalea persistente y un ojo izquierdo hinchado con visión borrosa. El examen oftalmológico reveló eritema en el párpado izquierdo y quemosis en la conjuntiva temporal y bulbar inferior. En su visita anterior se había realizado una tomografía computarizada (TC) craneal no mejorada. El escáner mostró una lesión de masa nodular que afectaba al seno cavernoso izquierdo. La angiografía por TC se utilizó posteriormente para determinar que la lesión era un aneurisma gigante en la arteria carótida interna cavernosa izquierda, lo que provocaba el agrandamiento de las venas oftálmicas izquierdas. Los síntomas de su ojo izquierdo evolucionaron rápidamente hacia una quemosis grave, un cambio edematoso en la región periocular y una limitación de los movimientos al cabo de 8 horas. La paciente fue sometida a una cantotomía lateral emergente y a una cantólisis inferior para evitar el síndrome compartimental orbitario agudo, y posteriormente fue tratada con una embolización con espiral asistida por stent. La rotura de la ACP es una situación urgente que requiere una rápida evaluación tanto de las lesiones vasculares craneales como de las oculares. La historia de una cefalea de inicio repentino con un ojo rojo unilateral agudo no doloroso puede servir como pista para solicitar estudios diagnósticos adicionales y la evaluación del oftalmólogo. Unos estudios radiológicos adecuados y una intervención endovascular temprana pueden reducir la probabilidad de una lesión ocular permanente y el deterioro de la visión.